Autor: viciosin1

Hola, aunque llevo mucho tiempo apuntado a este foro, nunca he escrito un relato y como dicen: más vale tarde que nunca, allá voy.

Cogí las vacaciones a mediados de agosto y aunque estaba deseando estar por fin con alguna de nuestras deseadas amigas, pues no me decidía. Hacía doce años que no estaba con ninguna travesti por circunstancias. El caso es que me decidí por Gabriela Sargentelly, por lo enculadora que es, lo suavito que lo hace al principio y la caña que da después, según la gente que ha estado con ella. Yo es la primera vez y no me ha defraudado.

Me voy a saltar todos los preliminares de como accedí a su casa y los nervios que tenía, etc.

Me abre la puerta y está detrás de ella, es más alta que yo, pero por los taconazos que lleva, yo mido 1, 80. Nos damos unos piquitos y caricias suaves. Tiene una voz sexy, aunque se la entiende un poco mal por el portugués que mezcla.

Entramos en su habitación, pago y la pido un vaso de agua, nervios, sed. Me pregunta si vengo limpito. si. Me pregunta si la quiero chupar, de tal forma que casi me desmayo, mientras se la desenfunda y me tiro a por ella como poseso ¡mamma mía! cuanto tiempo sin comerme un buen rabo. Se le pone durito rápido, tiene un buen armamento y no paro de mamarlo de arriba abajo, la puntita ¡que rica! le meto la lengua en el agujerito, que por cierto lo tiene grandecito, ya me lo imagino escupiendo leche mmmm. Lo saboreo, sus pelotas están gorditas, que delicia, estoy como en una nube.

Mientras ella empieza a sobarme el culo, me unta una cremita que tiene y me mete un dedito y dos a continuación, me soba y yo me abro más cada vez. Me dice al oído que si la quiero dentro, yo se lo suplico, me tiene como una perra caliente. La digo que despacito, a ver si es verdad la fama que tiene. ¡Señor! la ha metido y no me he enterado, acerco la mano y noto los huevos gordos tocándome el culo, notaba un dolorcillo interno, pero era porque me la había clavado toda y su punta me debía estar tocando un pulmón, con lo grande que la tiene, me va a partir. Debe ser alguna cremita con anestésico lo que pone, porque si no creo que lo habría notado jeje.

La deja clavada un rato hasta que mi culito se adapte, después de tanto tiempo me sorprende lo tragoncito que lo tengo. Se mueve suavito, a cuatro patas y me chupa la oreja, me dice cosas que no entiendo, pero con un tono que me pone como una puta insaciable.
Sin sacar la polla ni un solo instante, me culea de mil posturas, de lado, de pie contra un armario, con las piernas en sus hombros, de nuevo a cuatro patas, ahora sí, me sacude de lo lindo. No hago más que gemir como una zorra caliente, mientras que la pido que me parta el culo y la digo cosas que parece que estoy poseído por el diablo jiji, nunca mejor dicho. Es una máquina de follar y que bien lo hace ufffff, después de media hora culeándome, no puedo más y la digo que quiero su leche, me la hace de rogar, que mala es la muy perra.
Me la saca despacito, sale de la habitación y vuelve al minuto, con el preservativo quitado, con cara de poseída y diciéndome que donde la quiero. en la cara, en la cara. le cómo los huevos, que ya la van a estallar y se corre en mi cara, me la mete en la boca hasta el fondo. que ricooooo, mientras que yo me corro y le pongo la moqueta perdida. ahhhh que gustooooo.

Nos damos unos piquitos, charlamos muy suavito y prometo volver a visitarla, a la vez que la digo que escribiré un relato en el Taiaka, recomendando y diciendo sus habilidades. volveré Gabriela, lo haces de locura.

Está en Madrid, por la zona de Bravo Murillo, es sólo para pasivos.
Te quiero Gabriela.

Added on January 05, 2017 at 12:00 am